La primera aporta el óvulo, y la segunda se embaraza. De esa manera funciona el llamado método "ROPA" para que dos mujeres puedan, al mismo tiempo, ser madres.

Feritilización In Vitro

María Inés y Rossana están en una lucha por la maternidad, ya que el estado chileno sólo reconocerá a una como la mamá del niño que está por nacer. En un reportaje hecho por un canal de televisión de Chile se dio a conocer esta historia de dos mujeres que decidieron romper el tabú, ser parte de la generación del cambio, dando a conocer su homosexualidad y construyendo familia a pesar del desamparo legal.

Luego de firmar el acuerdo de Unión Civil (AUC), ambas decidieron realizar una ceremonia simbólica de casamiento. Se conocieron hace 10 años, cuando ambas tenían pareja y ahora van a ser madres.


Rossana explicó en pocas palabras cómo fue el proceso mediante el cual quedó embarazada:"Usamos el método ROPA. Le hicieron una estimulación ovárica a María Inés, le sacaron los óvulos, lo fertilizaron como una fertilización in vitro normal y transfirieron los embriones de cinco días a mi útero."

Método ROPA

El doctor Ricardo Pommer. de la clínica Monteblanco, valoró el paso que dio esta pareja y resaltó el cambio cultural que significa, y además cuenta cómo este método ROPA no sólo se ha aplicado en Chile, sino que otros países del mundo. "ROPA vendría siendo la abreviación de 'Recepción de Ovocitos de la Pareja'. El método ROPA se ha convertido en una elección cada vez más popular entre lesbianas. Como su nombre indica, la principal característica de esta técnica es que el tratamiento de FIV se comparte entre ambas mujeres: una se somete a la estimulación ovárica para aportar los ovocitos y su pareja gestará el embarazo y dará a luz."

(Fotos: Reproducción Asistida ORG)

Rossana y María Inés hicieron el procedimiento con toda la tecnología a disposición, y además contaron con un sólido apoyo de la familia.

Según el Código Civil de Chile, la maternidad queda determinada legalmente por el parto, cuando el nacimiento y las identidades del hijo y la mujer que lo ha dado a luz consta en la partida del Registro Civil. Sin embargo, para Ximena Lizama de la Fundación Iguales, "no tener el reconocimiento legal de ambas madres lo privan de una serie de derechos que sí tendrían otros niñ@s. No sólo tiene un efecto simbólico, sino que también mucho problemas prácticos".

A estas alturas en el tiempo en que vivimos, ¿por qué no dejamos que un futuro niñ@ pueda tener padres o madres que desean lo mejor para ellos independiente de no ser una familia "tradicional"? Demos el primer paso, y evolucionemos.