Cuenta una vieja historia que cierto día San Valentín caminaba por su jardín y escuchó a una pareja de jóvenes discutir. Se acercó a ellos con una rosa roja y les pidió que la sostuvieran juntos sin pincharse la manos, al tiempo que rezarán a Dios para que mantuviera su amor vivo por siempre.
Poco tiempo después, la pareja regresó pidiendo que los casara. La anécdota es conocida como ‘La Rosa de la Reconciliación’. Siglos despúes, esta historia se hizo popular y es la razón por la que cada 14 de febrero se regalan en el mundo más de 200 millones de rosas.
En la actualidad, el concepto de celebrar el día de San Valentín ha cambiado muchísimo y todo parece estar más enfocado a la comercialización y consumo de productos en forma de corazón, tarjetas con mensajes de amor, y peluches en todas las formas y tamaños.
Yonatan Beltrán / NetJoven